Dios de la carne
Y de la sangre
Has abandonado
Tu planeta de barro.
Lejos
Otros mundos
Te recuerdan
Y te exaltan.
La furia y los días
Se han ido
Y la Duda
Ya no existe.
Donde quedaron
Los amores sin medida
La lucha absurda
Y la muerte con sentido?
Pues el castillo
Ya no tiene ecos
Y la armadura herrumbrada
Olvida su héroe.
Derrumbado el bastión
Y la torre refulgente
Solo queda
El vacío llano de silencio.